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Roncas, dejas de respirar, amaneces cansado o andas con sueño durante el día... estos son síntomas que pueden alertar de un trastorno de sueño. Depende del perfil de la persona son los diferentes trastornos de sueño que pueden afectar conoce un poco identificando a que grupo perteneces.
Si está en este rango, y tienes presiones laborales o financieras, y roncas, es urgente que atiendas su estado de salud.
Los hombres en su etapa laboral productiva a menudo se enfrentan a exigencias altas y horarios ajustados. Si eres un roncador o si te han dicho que haces pausas respiratorias durante el sueño, o si te sientes cansado durante el día, es importante que evalúes tu sueño. Un trastorno de sueño puede reducir tu rendimiento laboral, afectar tu concentración y aumentar el riesgo de accidentes. Además, problemas como la apnea del sueño pueden conducir a enfermedades graves si no se tratan. Nuestra evaluación integral del sueño es conveniente, no invasiva y accesible, lo que te permite realizarla sin interrumpir tus actividades diarias.
Mujeres posmenopáusicas tienen mayor riesgo de trastornos del sueño. Si roncas, sientes fatiga o somnolencia, es esencial evaluarte.
Las mujeres después de la menopausia tienen un mayor riesgo de desarrollar trastornos del sueño, como el insomnio o la apnea del sueño. Si has comenzado a roncar o te sientes fatigada o somnolienta durante el día, es esencial que te evalúes. Un trastorno del sueño no solo puede afectar tu calidad de vida, sino que también puede aumentar el riesgo de enfermedades como la hipertensión y los problemas cardiovasculares. Nuestro modelo de evaluación es simple, accesible y te permite acceder a un diagnóstico y tratamiento adecuado.
El envejecimiento trae cambios en el sueño. Si sientes cansancio, roncas o ves deterioro en tu calidad de vida, una evaluación es vital.
El envejecimiento a menudo trae cambios en los patrones de sueño y un aumento en los trastornos del sueño. Si te sientes cansado, has comenzado a roncar o has notado un deterioro en tu calidad de vida, es importante que te hagas una evaluación del sueño. Nuestro modelo de evaluación es simple y no requiere que te expongas a un posible contagio en un centro asistencial. Mejorar la calidad de tu sueño puede tener un impacto significativo en tu bienestar general.
Dormir con un roncador puede afectar el bienestar y llevar al “divorcio del sueño”.
Dormir junto a una persona que ronca puede ser un desafío y puede afectar tu calidad del sueño y tu bienestar. Esto puede llevar al “divorcio del sueño”, donde las parejas deciden dormir por separado para mejorar su sueño. Es importante que tanto tú como tu pareja se realicen una evaluación del sueño. El ronquido puede ser una señal de un trastorno del sueño como la apnea del sueño. Nuestro modelo de evaluación es no invasivo y accesible, y puede ayudar a ambas partes a entender mejor la situación y encontrar una solución para mejorar su sueño y su relación.
Son algunas de las razones que pueden afectar a jóvenes de forma inesperada, pero dañina.
Los jóvenes y adolescentes también pueden sufrir de trastornos de sueño. Los patrones de sueño cambiantes, las demandas académicas y sociales, y el uso frecuente de tecnología pueden afectar la calidad de su sueño. Si eres un joven o adolescente y tienes problemas para dormir, te sientes cansado durante el día o tienes problemas de rendimiento académico, es importante que te evalúes. Un trastorno del sueño puede afectar tu salud, tu rendimiento académico y tu calidad de vida. Nuestra evaluación del sueño es simple y accesible, lo que te permite obtener un diagnóstico y tratamiento adecuado.
El insomnio es uno de los trastornos del sueño más comunes y se caracteriza por dificultad para quedarse dormido, mantener el sueño o despertarse demasiado temprano. Quienes lo padecen suelen sentirse cansados, irritables o con falta de concentración durante el día.
Puede ser ocasional, causado por el estrés o cambios en la rutina, o crónico, cuando persiste por más de tres meses. Dormir bien es esencial para la salud física y mental, por lo que identificar y tratar el insomnio a tiempo mejora significativamente la calidad de vida.
La apnea del sueño es un trastorno respiratorio que provoca pausas repetidas en la respiración mientras se duerme. Estas interrupciones pueden durar segundos o minutos y ocurrir varias veces por hora, afectando el descanso profundo.
El tipo más común es la apnea obstructiva del sueño, causada por el colapso de las vías respiratorias durante el sueño. Sus principales síntomas incluyen ronquidos fuertes, somnolencia diurna, falta de energía y dolores de cabeza matutinos.
Detectar y tratar la apnea del sueño es fundamental, ya que puede aumentar el riesgo de hipertensión, problemas cardíacos y accidentes.
La narcolepsia es un trastorno neurológico que afecta el control del sueño y la vigilia. Las personas con narcolepsia pueden quedarse dormidas repentinamente durante el día, incluso en medio de actividades cotidianas.
También puede presentarse cataplejía (pérdida súbita del tono muscular), parálisis del sueño y alucinaciones hipnagógicas al dormirse o despertarse.
Aunque no tiene cura definitiva, existen tratamientos que ayudan a controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida.
El ritmo circadiano es el reloj biológico interno que regula los ciclos de sueño y vigilia a lo largo de las 24 horas del día. Está influido por la luz, la alimentación y las rutinas diarias, y ayuda al cuerpo a saber cuándo es hora de dormir o mantenerse despierto.
Cuando este ritmo se altera —por ejemplo, debido al trabajo nocturno, jet lag o uso excesivo de pantallas— pueden aparecer problemas de sueño, fatiga y dificultad para concentrarse. Mantener horarios regulares y una buena higiene del sueño ayuda a mantener el equilibrio del ritmo circadiano.
Las parasomnias son comportamientos o experiencias anormales que ocurren durante el sueño o al despertarse. Algunos ejemplos son el sonambulismo, los terrores nocturnos, hablar dormido o las pesadillas recurrentes.
Aunque pueden parecer inofensivas, algunas parasomnias pueden afectar la seguridad o el descanso de quien las sufre. Identificar sus causas —como el estrés, la falta de sueño o ciertos medicamentos— es clave para tratarlas de forma adecuada.
El movimiento periódico de las extremidades es un trastorno del sueño en el que la persona realiza movimientos repetitivos e involuntarios de las piernas o brazos durante la noche.
Estos movimientos pueden interrumpir el sueño sin que la persona lo note, generando cansancio, irritabilidad y somnolencia diurna.
En algunos casos, se asocia con el síndrome de piernas inquietas o con otras alteraciones del sueño, por lo que una evaluación médica es importante para un diagnóstico y tratamiento adecuados.


